Quizás debería olvidarte, dejarte en esa parte de mí que conforma mi pasado y no abstraerte a mi mente cuando la melancolía me inunda.
Quizás nunca debí haberte hablado, no haberte visto, no haberte tocado, no haberte besado y deseado volver a hacerlo, quizás así no estaría como estoy ahora.
Quizás me equivoqué cuando te dejé ir, cuando te empujé de mi vida pese a que una pequeña parte de mí se negaba a hacerlo. Quizás fue ese pedazo de mí el que me impedía despedirme de ti, y me obligó a cometer pequeñas locuras en tu nombre.
Quizás si no te hubiera abandonado, nunca me habrías rechazado como lo hiciste después. Ahora es inviable un retorno a ese estado, desgraciadamente lo tengo asumido.
Quizás el dolor que sufrí fue tan solo un mínimo reflejo del que padeciste tú, y créeme cuando te digo que de verdad lo siento, ambos sabemos que jamás quise hacerte daño.
Quizás ahora podrías estar enamorado de mí, y yo de ti, y quizás mi mundo girara en torno a ti, o al menos gran parte.
Quizás esa sonrisa que aunque me cueste reconocerlo me sigue encantando, esa mirada que despierta un cosquilleo en mi estómago, pudieran haberme pertenecido.
Quizás fui un estúpido, quizás lo sigo siendo.
Quizás te quise, quizás te sigo queriendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario